Acaba de llegar la Semana Santa y muchas personas aprovechan para viajar al extranjero. Sea por ocio o por trabajo, el inglés es uno de los idiomas fundamentales junto al español. Como este último ya lo traemos de serie, vamos a echarle un ojo a las últimas convocatorias que hemos visto para aprender o mejorar esta segunda lengua.
Las becas Eurolingua permite a los estudiantes seleccionados estudiar durante tres semanas en Irlanda, recibiendo clases adaptadas a su nivel y alojándose en familias locales o en residencias universitarias, lo que permite conocer más a fondo la sociedad irlandesa. El viaje se completa con excursiones a sitios cercanos para profundizar en la cultura del país. La beca se dirige a estudiantes de más de 16 años. Si eres universitario, tu expediente académico debe tener al menos una media de seis puntos sobre diez. El plazo de presentación de solicitudes finaliza el 21 de abril y con ellas mejorarás tu expresión oral.
¿Es posible aprender inglés sin salir de España? La respuesta es sí. Para ello están las becas intensivas de inmersión lingüística del Ministerio de Educación, abiertas en su plazo de inscripción hasta el 9 de abril. Aquí es necesario haber nacido entre el 1 de enero de 1995 y el 31 de diciembre de 1998, estar matriculado en el presente curso en bachillerato, enseñanzas profesionales de música y danza, grados medios de formación profesional, artes plásticas y diseño, enseñanzas deportivas o en una enseñanza de idiomas de nivel intermedio o avanzado, habiendo obtenido al menos un siete en la asignatura de inglés.
Para aquellos que ya tienen un buen nivel de este lenguaje, también hay excelentes oportunidades, como es el programa Stepone, que desarrollará las habilidades de recién graduados o estudiantes de último año de carreras relacionadas con informática o matemáticas. Hay que tener nacionalidad española, ser menor de treinta años, tener un buen nivel de inglés y rellenar la documentación para participar antes del 30 de abril. El programa consiste en unas prácticas de seis meses en empresas y, posteriormente, continuar la formación en ciudades como San Francisco y Nueva York. La Fundación Rafael del Pino es la que se encarga de este programa.
