El año 2016 tiene abiertas múltiples convocatorias de oposiciones en diferentes puestos de trabajo. Después de meses congeladas, las pruebas para acceder al sistema público de empleo han vuelto a abrir sus puertas. La competencia ha crecido a causa del alto número de desempleados y del tiempo en el que los opositores se estaban preparando, pero no había convocatorias. Sin embargo, se puede estudiar una oposición y no morir en el intento si sigues estos consejos.

La constancia es tu mejor aliada. Aprobar una oposición supone muchas horas frente al temario y una concentración a prueba de videojuego. Por eso tener un lugar con buena iluminación, ventilado y en el que evitar las distracciones se convierte en clave para lograr una plaza.

Planifica a través de un horario, corcho o aplicación para el móvil los temas que vas a estudiar cada día. Si tienes un profesor que te va marcando los ritmos hazle caso, ellos han preparado durante años a muchos otros opositores como tú y saben a qué darle más importancia. Dosificar es necesario para evitar que el estrés y la presión acaben contigo, por eso te recomendamos empezar a estudiar con tres o cuatro horas diarias. Aumentar después de unos meses a seis horas al día y, finalmente, tomárselo como una jornada laboral: ocho horas al día, cinco días a la semana y la posibilidad de hacer horas extra si algún tema se te atraganta.

Combina el estudio con ejercicio físico, lecturas de otras cosas que no tengan que ver con el temario (periódico, revistas, novelas, poesía, etc.), no abandones por completo tu vida social e incluye tiempo libre en tu horario.

Realiza simulacros de exámenes para habituarte al modo de preguntar que tienen. Las academias pueden proporcionarte estos materiales, que también están disponibles en bibliotecas o a través de Internet.

Pregunta a gente conocida que haya estudiado también oposiciones, especialmente de tu misma rama. Además de entender mejor el proceso psicológico por el que pasas, sabrá orientarte en qué debes profundizar y qué trámites administrativos no debes olvidar.

Por último, estate atento a los plazos de presentación de los documentos que necesiten para realizar la oposición, pues de nada sirve todas las horas que inviertas frente a los apuntes si olvidaste pagar las tasas en tiempo y forma. La instancia es el primero de los documentos que debes rellenar para acceder a una oposición. Comprobar si tu titulación se adecúa a los perfiles de los puestos es también importante, para no estudiar en balde.